ramaje ovillado a mi corteza,
porque si despiertas
hay palabras trazadas
y una cara estudiada de misterio;
durmiendo, un bostezo, una vidriera
un color verdadero de la lengua.
Esperaría siglos
a que no te des la vuelta
y empujaría las sombras
por saber qué estás soñando.
Pero si no vas a ser mi camino
y mi tesoro escondido
en el bosque,
si no vuelves a ser
el humo, la llama
y el rescoldo,
si hasta la luz del alba
no te vuelves infinito
un instante,
entonces, hoy,
no quiero despertarte
por si tu ausencia
revienta como un globo
en medio de la noche.
y una cara estudiada de misterio;
durmiendo, un bostezo, una vidriera
un color verdadero de la lengua.
Esperaría siglos
a que no te des la vuelta
y empujaría las sombras
por saber qué estás soñando.
Pero si no vas a ser mi camino
y mi tesoro escondido
en el bosque,
si no vuelves a ser
el humo, la llama
y el rescoldo,
si hasta la luz del alba
no te vuelves infinito
un instante,
entonces, hoy,
no quiero despertarte
por si tu ausencia
revienta como un globo
en medio de la noche.
Imagen: Laura Makabresku